La arquitectura islámica se caracteriza por la horizontalidad, a excepción de los minaretes. Los tipos arquitectónicos islámicos, incluyen las construcciones abasíes (segunda dinastía de califas, sucediendo a la de los Omeyas), mezquitas en forma de T, y las mezquitas con bóveda central en la península de Anatolia.
Elementos clave en el diseño islámico, imitados de la primera mezquita construida por Mahoma en Medina son:
· Patios grandes combinados a menudo con un pasillo central para el rezo
· Minaretes o torres, que fueron utilizados originalmente como atalayas-antorcha
· Mihrab u hornacina inmerso dentro del muro indicando la dirección a la Meca
· Bóvedas y Cúpulas
· Iwanes (pasillo o espacio abovedado) colocados entre diversas secciones para dividirlas
· El uso de la forma geométrica y el arte de la repetición
· El uso de caligrafía árabe para decorar, en lugar de pinturas, que estaban prohibidas en la arquitectura de las mezquitas
· La fuente de abluciones
· El uso de colores brillantes
Las mezquitas de planta árabe o hipóstilo son las más tempranas. Son o bien de planta cuadrada o bien de planta rectangular, e incluyen un patio y un pasillo cubierto dedicado al rezo. Tenían azoteas planas encima de los pasillos, haciendo necesario el uso de numerosas columnas y soportes. Una de las más importantes es la Mezquita de Córdoba, edificio soportado por más de 850 columnas.
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